La nueva ley LOMCE

Entrevista con Jacobo Calvo sobre la ley LOMCE disponible aquí.

 

Documento comparativo de las leyes LOE y LOMCE elaborado por CCOO:abla_comparativa_LOMCE-LOE.pdf (581694)

El profesor de primaria y asesor del CEP de Granada, Jacobo Calvo, expone en el vídeo (cuyo enlace se encuentra más arriba) de forma clara y bastante certera, bajo mi punto de vista, las consecuencias que tendrá la implantación de la LOMCE en los centros de educación primaria. Sin embargo, esas consecuencias no distan mucho de las que se darán en el marco de la Educación Secundaria Obligatoria, ni en el de la Formación Profesional.

Al hacer del Consejo Escolar un órgano consultivo y del director una figura política de poder en los centros, parece ser que lo único que importan son los números: los números en estadísticas, los números en los resultados académicos y los puestos que se ocupan en el ranking. Por esta razón, la LOMCE lo enfoca todo al éxito escolar del alumnado; y para conseguirlo, la nueva ley establece una serie de medidas innovadoras que convierten a los institutos de Educación Secundaria en una simulación grotesca del mundo empresarial.

A partir de la implantación de la LOMCE, los resultados académicos se convierten en la orden del día (no es que no lo fueran ya antes), pero ahora, y como bien dice Jacobo, esos resultados tienen que "rendir cuentas" al órgano educativo. Esa rendición de cuentas se ha denominado: Pruebas de evaluación externa en Primaria o Evaluación Final de Educación Secundaria Obligatoria. Mi pregunta es: ¿Qué valor educativo tiene la implantación de estas nuevas pruebas de diagnóstico?

En mi opinión,  esos análisis te proporcionan datos útiles para detectar problemas de aprendizaje y lagunas en competencias básicas, pero no ayudan a resolver el gran problema del fracaso escolar. Esas pruebas son muy útiles para el profesorado a la hora de adaptar el currículum, pero no debería ser un elemento clave para decidir si un alumno de secundaria tiene acceso al título o no. El profesorado está adaptando poco a poco la implantación de este tipo de pruebas extraordinarias, pero ¿están preparando al alumnado para ellas? ¿Y si lo están haciendo, qué pasa con el resto de conocimientos y capacidades que no contemplan las pruebas de diagnóstico? ¿Se puede llevar a cabo un currículum integrado con la implantación de estas pruebas?

Además, como bien se indica en el vídeo, en la nueva legislación, no se fomenta el apoyo a la diversidad, sino más bien a una selección natural de los alumnos: los que sean capaces de adaptarse seguirán superando cursos, per los que no quedarán relegados a Programas de mejora del Aprendizaje, cuya excusa de aplicar especial atención a aquellos alumnos que "presentan dificultades generalizadas de aprendizaje", les permite desprenderse disimuladamente de aquellos alumnos que no les sirven para rellenar la casilla de un rendimiento académico aceptable. 

¿Y qué ocurre con esos alumnos? Lógicamente, quedan relegados al fracaso escolar (recuerdo que aquellos que no aprueben las evaluaciones externas no tienen acceso al título), o a la obtención del título en dudosas circumstancias. Estos factores, a mi entender, conllevan a la pérdida de oportunidades para superarse y motivarse a sí mismo de este sector del alumnado. Además de traerles dificultades de integración en la sociedad.

En otras palabras, el enfoque empresarial de la LOMCE daría resultado si todos los alumnos que llegan a las instituciones de la enseñanza tuvieran las mismas características, las mismas capacidades y tuvieran que adquirir las mismas competencias. Por suerte o por desgracia, la realidad dista mucho de esa utopía política. Se habla de diversidad; se habla de atención a las necesidades del alumnado; se habla de la gestión de las capacidades de los adolescentes, pero a la hora de la verdad, los números son los números; los resultados son los resultados y los puestos del ranking, son los puestos del ranking.